¡Ábrele la Puerta a la Bendición a Través de la Obediencia!
- Alberto Garcia
- 18 nov
- 3 Min. de lectura
Hoy nos enfocamos en un tema vital que es la llave para desatar la prosperidad en todas las áreas de nuestra vida: Ábrele la puerta a la bendición.
Dios desea que seamos prosperados en todo. Esta fue la promesa dada a Abraham, que es un modelo para nosotros: "Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan. Por medio de ti serán bendecidas todas las familias de la tierra".
La Obediencia Abre la Puerta
Abraham, para ser bendecido, tuvo que aprender a obedecer. Aunque tenía 75 años, no puso excusas como su edad o su comodidad. Él dejó su tierra, su nación, sus parientes, y la casa de su padre, a pesar de no tener una ruta clara ni un mapa.
La obediencia no va de acuerdo a lo que nuestra mente lógica dicte. Si la obediencia de Abraham hubiera sido con su mente, él no obedece.
La puerta de la bendición se abre cuando tú obedeces.
Las bendiciones que Dios ha preparado solo se activan cuando obedecemos.
Una puerta cerrada mantiene la bendición afuera y se cierra a través de la desobediencia. Una puerta abierta se abre a través de la obediencia, dejando entrar las bendiciones.
Abrir la Puerta de la Bendición Implica:
Confiar sin tener detalles: Aunque no tengamos todos los detalles, si Dios nos dice que lo hagamos, debemos hacerlo.
Avanzar aunque no entendamos todo: Debemos avanzar y obedecer, aunque las cosas no sean lógicas para nosotros.
Dejar o Dar: El obedecer es muchas veces dejar, dar, salir o renunciar a nuestra naturaleza egoísta.
Las Promesas de la Obediencia
La obediencia de Abraham nos abrió la puerta a grandes promesas:
Haré de ti una gran nación: Tu familia será una familia de mucha influencia.
Te bendeciré: Es una promesa de bendición continua.
Engrandeceré tu nombre: Serás famoso, reconocido y de influencia.
Serás de bendición: Podrás ser de bendición a otros y no pedirás prestado.
Bendeciré a los que te bendijeren: La gente que te bendiga a ti será bendecida inmediatamente.
En ti serán benditas todas las familias de la tierra: Tu familia será de tanta bendición que otros querrán estar contigo.
Un Corazón Apasionado y Enseñable
Aprendemos de María Magdalena, quien demostró un amor apasionado y una obediencia sin esperar nada a cambio. A pesar de que Jesús estaba físicamente muerto, ella fue a la tumba, no con las manos vacías, sino comprando especias para ungir Su cuerpo.
Su ofrenda con un corazón apasionado produjo una respuesta maravillosa: el ángel corrió la piedra para que ella fuera testigo del poder de Jesús.
Cuando ella escucha la voz de Jesús que la llama por su nombre, ella lo llama "Rabboni" (Maestro). Esto enseña que era una mujer enseñable, dispuesta a ser alumna.
La obediencia es la clave de la felicidad y muchas veces se activa cuando no tenemos ganas de hacer las cosas.
🔑 Obediencia y Autoridad
La obediencia también está ligada a la autoridad. Estar en obediencia es estar bajo autoridad, lo cual te guarda. Nunca dejes de rendir cuentas, pues la autoridad te bendice y guarda tu vida.
Oramos por un corazón obediente que nos lleve a:
Confiar en Dios a pesar de las limitaciones.
Avanzar aunque no entendamos.
Obedecer aunque parezca ilógico.
¡Abre la puerta de la bendición hoy!
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